domingo, 29 de agosto de 2010

LA VIDA DESPUÉS DE LA CIRUGÍA PARA LA OBESIDAD: / Un Testimonio a más de 3 Años de su Intervención

Hacía varios años que había comenzado a engordar. Exactamente, fue luego de mi último parto, 14 años atrás. Comía mal y a deshora y llegué a pesar 156,300 kg. Y ya no podía moverme.
Estuve postrada por tres meses, con problemas de aplastamiento de las vértebras lumbares que mordían mi nervio ciático. 

Cuando fui a junta médica, por mis licencias (soy docente de jardín de infantes) me dijeron que debía comenzar con un tratamiento para adelgazar, pues mi problema era la obesidad y no la ciática.

Mi madre, preocupada por mi salud, fue preguntando por algún especialista en mi problema y llegó hasta el Centro Médico, donde le recomendaron hablar con el Dr. Serra, y él le dijo que fuera a ver a la doctora Aguirre Ackermann.

Es así que llegué a su consultorio particular, pensando que me daría un tratamiento de comidas para adelgazar, y grande fue mi sorpresa cuando me informo que padecía de obesidad de III grado, que el tratamiento médico es poco efectivo con esta obesidad y que lo conveniente sería evaluar la posibilidad de una cirugía para la obesidad.

La doctora me dio una serie de estudios que debía realizar, y como diagnóstico ponía "evaluación para cirugía de la obesidad". Luego de realizarme todos los estudios, aparecieron varias dolencias que no sabía que las tenía hasta ese momento, lo único sano era mi corazón.

Recuerdo que todos me decían que lo único recomendable para un rápido descenso de peso, era la operación de by pass gástrico, ya que entre otras cosas tenía esteatosis hepática es decir que se acumulaba grasa en el hígado.

Una vez hecha la evaluación el equipo del Dr. Serra me dijo que estaba en condiciones de operarme y que haríamos los papales para intentar lograr la autorización de la obra social. Este último fue un paso difícil ya que, si bien me dijeron que tenia indicación de cirugía, no tenían reglamentada la cobertura. Fueron meses de mucha paciencia porque por mi problema económico no podía solventar ese gasto de una cirugía en forma particular e hizo que me entregara en manos de mi señor.

Tres meses después de volver de a mi querida santo tome y la negativa de la obra social de cubrir la cirugía, llego de la escuela y recibo la llamada de la doctora Aguirre Ackermann, que me decía "Mirta, sale tu operación”. Vení hoy a corrientes. Para presentar tu carpeta y que los firmen en la obra social".

Fue así que con la ayuda de dios, fui, y al presentar los papeles no tuve ningún problema; firmaron y volví feliz al centro médico y me dijeron, "está todo bien, el 26 de julio, la operaremos. 10 días antes comenzara con una dieta líquida, preparatoria para la operación y se le harán nuevos análisis" los hice y salieron bien.

Cuando me interné, fue algo impresionante la atención que recibí por parte de todo el quipo de cirugía que estaría a cargo de la operación, cada uno vino a verme y a charlar conmigo sobre lo que me iban a realizar y que me quedara tranquila.

Les aseguro, que en ningún momento tuve miedo. Al contrario sabía que dios estaría en el quirófano junto a mí y tomaría sus manos. Me cuidaron tanto en la preparación previa a la operación, que luego de la misma jamás tuve una complicación.

Fui muy cuidada, en todo momento, nunca me tocó una enfermera. Todas las curaciones, los vendajes, etc. Los realizaban los cirujanos que componían este excelente equipo de médicos.

No tengo más que agradecimientos hacia ellos, Siempre me trataron muy bien.

Hoy tengo 94 kg. A algo más de 3 años de mi by pass gastrico y con 60 kg menos volví a vivir. Hace 3 años que parece que nací nuevamente.

Puedo realizar todas las cosas que antes me eran imposibles. Soy feliz. Trabajo con entusiasmo. Puedo estar parada mucho tiempo sin darme cuenta, cosa normal para todo el mundo, menos para el que sufre de obesidad.

Ya no siento más el problema de ciática, no me duelen las rodillas ni se me hinchan los pies. Puedo darme vueltas en la cama y levantarme rápidamente, cosa que antes era un suplicio para mi. Salgo a caminar, puedo andar en bicicleta, etc.

Gracias!!!
Que dios, nuestro señor, los bendiga y los guíe para que sigan siendo un instrumento de él; para ayudar a tantas personas que como yo, están en peligro de muerte a causa de la obesidad.

Bendiciones!!!!
Mirta

La cirugía para la obesidad permite no solo bajar de peso en forma controlada, sino también ayuda a poder mantenerlo en el tiempo. Esto se produce por un efecto directo de la cirugía (restricción, es decir por dejar un estómago más pequeño y por disminución del hambre debido a que disminuye la hormona que lo produce), y por el cambio de conducta que la cirugía facilita en el postoperatorio.

Descenso y mantenimiento le permiten al paciente una nueva vida, más activa, más saludable y según nos cuentan nuestros pacientes con más alegrías y posibilidades.

Se viven experiencias que anteriormente no imaginaban poder disfrutar. Mirta nos cuenta que estaba postrada y ahora, 60 Kg. menos se sube a su bicicleta y sale a pasear. Quien lo hubiera pensado.

Felicitaciones a Mirta

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