Casi un centenar de equinos de esta capital fueron desparasitados el sábado por personal de la Dirección de Sanidad Animal del Ministerio de Producción, Trabajo y Turismo, a partir de un pedido de colaboración efectuado por la Asociación de Carreros al secretario del área, Cristian Vilas.
En el operativo estuvo a cargo de los médicos veterinarios Sara Romero, Antonio Núñez y José Vega y se desarrolló en el barrio Laguna Seca de 9 a 16, aproximadamente.
La desparasitación periódica del caballo permite romper el ciclo parasitario limitando los riesgos de contaminación
El parasitismo, si no es controlado, puede acarrear graves consecuencias sobre la salud del caballo. Todas las categorías de caballos, ponys y burros están afectados, de cualquier edad, raza y condición de vida.
Las consecuencias ligadas a la presencia de parásitos son: Bajada del estado general, con un pelo mate; Disminución del apetito; Cólicos; Diarrea o alternancia de diarrea y estreñimiento; Problemas y retraso del crecimiento en potros y yearlings; Peligros de aborto en la yegua gestante por cólicos y enfermedades que pueden ser asociadas al parasitismo: cojeras, hemorragias, orquitis, dermatitis y neumonías, llamadas también catarros de verano.
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