Hoy fue el turno de los barrios San Martín y 17 de Agosto, en donde se efectuaron minuciosos trabajos de relevamiento vectorial para obtener los índices que demuestren la presencia o no del vector Aedes Aegypti. Cabe mencionar el trabajo coordinado por la Provincia y en el que también participan técnicos de Nación y del municipio Capitalino.
Se inició hoy una nueva semana de trabajo en terreno a cargo de los agentes sanitarios y técnicos en prevención del dengue, quienes siguiendo las indicaciones del LIRA (Levantamiento de Índice Rápido de Aedes Aegypti) recorrieron los barrios San Martín y 17 de Agosto. En total, más de 40 personas entre agentes sanitarios y técnicos formados para estas tareas visitaron las casas seleccionadas para evaluar la presencia de posibles criaderos del mosquito transmisor del dengue.
Como todas las mañanas, luego de recibir las indicaciones por parte de los coordinadores del área de Zoonosis y Control de Vectores de la Provincia, el personal avocado a las tareas se trasladó hasta los mencionados barrios en los que hicieron una observación minuciosa como se indicó en las jornadas de capacitaciones previas para elevar los informes correspondientes.
Cabe recordar que la ciudad Capital se dividió en 8 grandes estratos, abarcando cada uno de ellos a numerosos barrios. A través de un sistema de información rápida se eligen una de cada cinco viviendas para el muestreo, arrojando luego los datos certeros en porcentajes de presencia vectorial y cuáles son las zonas más comprometidas en donde necesitarán un trabajo intenso y efectivo para controlar al mosquito transmisor del virus del dengue.
En la planilla de los agentes debe especificarse el lugar, la dirección exacta de la vivienda o si es un terreno baldío, la situación de la vivienda, los tipos de recipientes encontrados, el número de muestras colectadas, entre otros datos que son cargados al finalizar la jornada. La indicación es que todos los recipientes de agua deben estar cuidadosamente inspeccionados y los recipientes de potenciales criaderos deben ser clasificados en cinco grupos diferentes. Las muestras larvarias deben colocarse en tubos numerados con los datos específicos que son llevados luego para el análisis entomológico de laboratorio.
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