La seguridad pública es cuestión de estado para el gobierno provincial y en ese sentido, este martes, en sede de la Jefatura de Policía se realizó el acto de presentación del Sistema de Identificación de Huellas Dactilares Automáticas (AFIS). Esta tecnología puede atesorar más de 100 mil huellas que sirven para la identificación de individuos y cotejar con la base de datos los rastros que se dejan en las escenas donde concretan los delitos desde el laboratorio de identificaciones forenses. Con ello, Corrientes se coloca a la vanguardia entre las provincias del NEA en materia de apoyatura en la investigación criminal.Encabezó el acto el ministro de Gobierno, Gustavo Valdés, y se hicieron presentes, el ministro de Justicia, Eduardo Hardoy, el Jefe de Policía de la provincia, Juan Alfredo Ojeda, interventores de entes autárquicos, el fiscal general, César Sotelo, la senadora provincial, Alejandra Seward de Panseri, autoridades del poder judicial, representantes de fuerzas armadas y seguridad e invitados especiales.
“Es un día trascendente con la puesta en marcha de este sistema que pone a Corrientes a la altura de las mejores del país en la materia. Nuestra policía tenía prácticamente desmantelado el sistema de peritajes. Teníamos una asignatura pendiente y al asumir esta gestión fuimos revirtiendo la pobreza de equipamiento para realizar pericias”, fueron los conceptos iniciales en la presentación, por parte del titular de la cartera de Gobierno, Gustavo Valdés.
Seguidamente mencionó que luego de una inversión importante del gobierno en el área de peritajes, “hemos logrado reconstituir el sistema, que nos permite apoyar a la policía como auxiliares de la justicia en la investigación criminal”.
Valdés puso de manifiesto que se trata de uno los sistemas más modernos que existen y destacó que “la digitalización de las huellas dactilares, es una tecnología que solo tienen la nación y otras cinco provincias en todo el país, por lo que nos colocamos en la vanguardia del Nordeste argentino, con la mayor tecnología policial y de apoyo a la justicia. Disponemos del mismo sistema que, por ejemplo, utilizan el FBI e Interpol”.
Al comentar las bondades del sistema, Valdés dijo: “AFIS criminal nos permite tener el cúmulo de más de 100 mil huellas decadactilares y una 25 mil palmares, que son únicamente para aquellas personas que tienen sus antecedentes en la fuerza. La Policía de Corrientes cuenta hoy con alrededor de 600 mil huellas digitales que están en condiciones de ser levantadas”.
Y acotó: “Nos va a permitir realizar la comparación digital de un rastro, directamente con el archivo que contamos en Jefatura de Policía”.
Según las palabras del funcionario provincial, se logrará “un avance significativo de apoyatura en materia de investigación criminal, que redundará en beneficio de un mejor servicio en la justicia, en la prevención y represión del delito en todo el ámbito del territorio provincial”.
Asimismo, Valdés aprovechó la oportunidad para poner de manifiesto que las inversiones del gobierno provincial hacia la Policía de Corrientes seguirán siendo una constante. En ese horizonte precisó que recientemente se puso en funcionamiento un cromatógrafo de gases, laboratorio de revelado color de última tecnología y moderno equipamiento para las pericias caligráficas.
Aseguró además que en breve, se dotará a la fuerza con aparatos de comunicación troncalizada, entre otras inversiones.
También remarcó la utilización del servicio del 911, que viene dando muy buenos resultados en la prevención y acción contra hechos delictivos.
Cabe señalar que el funcionamiento del Sistema AFIS es posible tras una ardua e intensiva capacitación del personal policial. La base de datos de la policía ya se encuentra siendo digitalizada y el personal está en condiciones de manejar el sistema.
Esto representa una mejorará sustancial en el trabajo criminalístico ya que se digitalizaron todas las fichas que hasta antes del inicio de esta capacitación conforman la base de datos de huellas dactilares.
La instalación de los equipos ya se realizó en el área de logística en la Jefatura de Policía. Este proceso se inició el 12 de marzo pasado, día en que llegaron a la provincia los técnicos que desplegaron la capacitación correspondiente al personal.
Sistema AFIS
El AFIS es un sistema informático compuesto de hardware y software integrados que permite la captura, consulta y comparación automática de huellas dactilares agrupadas por fichas decadactilares, monodactilares o en forma de rastro o latente, basados en las ciencias biométricas.
La biometría se dedica a la identificación de individuos a partir de una característica anatómica o un rasgo de su comportamiento. Una característica anatómica tiene la cualidad de ser relativamente estable en el tiempo, tal como una huella dactilar, la silueta de la mano, patrones de la retina o el iris.
En la actualidad las huellas dactilares representan una de las tecnologías biométricas más maduras y son consideradas pruebas legítimas de evidencia criminal en cualquier corte del mundo.
Una huella dactilar es la representación de la morfología superficial de la epidermis de un dedo. Posee un conjunto de líneas (crestas papilares) las cuales se forman a partir del sexto mes de vida intrauterina y permanecen sin que el tiempo genere alguna clase de cambio o modificación, están dispuestas en forma paralela. Sin embargo, estas líneas presentan diferentes morfologías, también conocidos como puntos característicos, los que más predominan son las terminaciones en forma abrupta y las bifurcaciones, los cuales en el argot de AFIS se conocen técnicamente como minucias.
Si dos huellas dactilares corresponden o no a la misma persona se lleva a cabo un procedimiento que comienza con la clasificación de la huella dactilar y termina con el matching o comparación de las minucias de ambas huellas. La clasificación de huellas corresponde a un análisis a escala "gruesa" de los patrones globales de la huella que permite asignarla a un conjunto predeterminado o clase, lo que se traduce en una partición de la base de datos a ser revisada.
Por otro lado, el matching de huellas lleva a cabo una comparación a escala "fina" de las huellas dactilares a partir de los vectores de características resultantes de representar la geometría de cada una de las minucias. En otras palabras, el matching de huellas dactilares consiste en encontrar el grado de similaridad entre dos vectores de características cuyas componentes representan a las minucias de cada huella.
Estos sistemas se emplean desde hace varios años, pero al principio eran sólo archivos informatizados que funcionaban con ayuda manual (los datos tenían que buscarse personalmente). Con el tiempo, se han perfeccionado y se han convertido en sistemas integrados, que utilizan tecnología digital: la huella se puede escanear para su búsqueda y cotejo en el sistema o se introduce directamente a través de un "live-scan", Asimismo, existen programas de software que permiten "limpiar" la imagen de una huella dactilar si no se aprecia con claridad o reconstruirla en pantalla, a través de algunos parámetros.
Pero lo más relevante de los AFIS es que el propio ordenador se encarga de cotejar la información que hay en su archivo y averiguar si por ejemplo el detenido tiene antecedentes y no importa si se ha cambiado el nombre siempre y cuando existan sus impresiones dactilares en el sistema.
Existen dos clase de AFIS, el civil y el Criminal, sistema AFIS Criminal tiene como objetivo la lucha contra el crimen. Se utiliza para buscar rastros (una huella "latente" encontrada en la escena de un crimen), contra una base de datos AFIS con el objeto de identificar a la persona poseedora de dicha huella o comprobar que el dueño de la latente no se encontraba en otra escena de un crimen donde dejo sus huellas.
Una huella latente puede ser una fracción ínfima de una huella dactilar, de la cual generalmente el perito no conoce a que dedo pertenece, ni su orientación, ni su centro, ni ningún otro dato que reduzca el universo de búsqueda (sexo del dueño, color de piel y otros).
Por lo tanto el sistema AFIS cotejará dicho rastro contra cada uno de los 10 dedos de cada persona presente en la base de datos, y contra otra base de datos donde se encuentran todos los rastros no identificados que se guardaron de escenas de crímenes anteriores.
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