Actualmente, existen procedimientos que solucionan inconvenientes provocados por el estiramiento o flaccidez de los labios mayores y menores, el engrosamiento del Monte de Venus entre otros. Las razones por las que alguien se somete a una cirugía íntima pueden ser estéticas, físicas o psicológicas.
Las alteraciones, además, se producen por diversas causas que no sólo son genéticas y/o congénitas. Los embarazos, las variaciones en el peso, algunos trastornos hormonales o, por qué no, el natural envejecimiento son algunos de los factores que pueden modificar el órgano sexual femenino. Para ello existen cirugías estéticas destinadas exclusivamente a mejorar las zonas más íntimas, y se practican a nivel de los órganos sexuales, principalmente femeninos aunque también se realizan en los órganos masculinos.
Las cirugías íntimas femeninas comprenden un grupo reducido de intervenciones, ellas son:
Lipoaspiración del monte de venus:
se realiza en aquellas mujeres con abundante tejido graso en la parte frontal del hueso púbico, lo que da un aspecto voluminoso
Se practica en quirófano con anestesia local, más sedación o bloqueo de la conducción nerviosa. A través de cánulas se lipoaspira el excedente de grasa.
Es una cirugía que dura aproximadamente 1 a 2 horas. Luego la paciente se retira o queda internada de 12 a 24 hs., depende de la anestesia empleada. Retorna a sus actividades a los 2 ó 3 días, y puede tener relaciones sexuales a las 2 ó 3 semanas.
Labioplastía:
encaminada al rejuvenecimiento de los genitales externos femeninos en pacientes con problemas de labios vaginales grandes, o con perdida de tersura o volumen, etc. También como la anterior, se realiza con anestesia local, mas sedación, y a veces con bloqueo en la conducción nerviosa.
Consiste en realizar cortes del tejido excedente, o puntos especiales para la flaccidez.
Es dada de alta en la fecha o todo depende de la anestesia utilizada, pudiendo volver a sus actividades a los 2 ó 3 días.
Lipoescultura de glúteos:
se realiza en pacientes con exceso de grasa, con algunas deformaciones como depresiones entre otras.
Se lleva acabo en quirófano con anestesia local mas sedación, o a veces con bloqueo anestésico. Consiste en aspirar lo excedente de grasa, y en otras situaciones inyectar en las zonas deprimidas, tratando de emparejar la superficie.
Dura de 2 a 3 horas y luego la paciente es dada de alta, siempre dependiendo del tipo de anestesia utilizada, continuará con los controles por consultorio externo.
Estas cirugías deben ser realizadas por un cirujano plástico capacitado y a veces acompañado de un cirujano ginecológico.
DR. VELÁZQUEZ DABAT, EDUARDO A.
MIEMBRO TITULAR DE LA SOC. ARG. DE CIRUGÍA PLÁSTICA.
MIEMBRO TITULAR DE LA SOC. DE CIRUGÍA PLÀSTICA DEL NEA.
MN: 94793
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