“Mortalidad Materna en el NEA. Evaluación a nivel local y regional” es el título del trabajo que dirigen los doctores Alfredo Gustavo Zurita y Alberto Palladino, titulares de las cátedras Salud Pública y Atención Primaria, Epidemiología e Informática II, respectivamente. La tarea de campo y recolección de datos estuvo a cargo del alumno avanzado de la carrera de medicina, y personal del Plan Nacer, Julio Moreyra.
La investigación surgió con la idea de detectar los problemas y las carencias en la atención del embarazo y del parto que no alcanzan a prevenir el deceso de la madre antes, durante o después del nacimiento. Se hace extensivo el trabajo a la región ya que esta parte del país presenta el doble de muertes maternas de las que sucede en toda Argentina. “En el NEA hay 10 muertes por cada diez mil nacimientos. En todo el país, esa relación desciende a menos de cinco fallecimientos por cada diez mil partos”, explicó Alberto Palladino.
Registros en alza. En 2008 se realizó en Buenos Aires la reunión especial del Comité de Muerte Maternas de la Organización Mundial de la Salud, un encuentro que se concreta cada año desde su creación en Ginebra. “En esta oportunidad se realizó en Argentina porque se considera que la situación de la mortalidad materna en el país es especialmente trágica. No por las cifras, ya que hay países que tienen índices muchos más altos, como sucede en Paraguay, Bolivia, Perú, sino por el hecho de que es inexplicable que ello suceda cuando prácticamente el 100 por ciento de los partos se realizan en hospitales”, explicó al respecto el doctor Alfredo Zurita.
A diferencia, en otros países, prosiguió el investigador, tienen mortalidad elevada pero muchos de los partos se realizan en las casas. “Por esa razón y por el hecho de dentro de la Argentina es el norte del país el que tiene las cifras de mortalidad maternas más elevadas, nos propusimos empezar a investigar qué es lo que está pasando”.
Comentaron los médicos que la mortalidad materna había descendido mucho en la región, sin embargo, hacer cinco años retomó una tendencia creciente que preocupa, pese a que no es una causa de muerte que se cobre tantas víctimas como algunas afecciones o situaciones. “Si miramos las cifras absolutas no es muy significativo pero se trata de una problema que se puede revertir detectando las fallas y trabajando sobre ellas”, mencionó el profesor Zurita.
Por año se registran 300 muertes en Argentina, en Corrientes entre 10 y 20 cada año. Pese a ello, insisten los investigadores “no es un problema grande en dimensión si se lo compara con las víctimas que dejan los accidentes de tránsito, por ejemplo. Pero sí es una cuestión que se debe resolver”.
El problema de la mortalidad materna es algo que sucede dentro del hospital, por lo cual se debe resolver en este marco, sostuvieron los médicos. “Ocurren evidentemente por problemas que se dan en la atención del embarazo y el parto y que no son resueltos satisfactoriamente puesto que en otros países desarrollados que tienen como nosotros el 100 por ciento de partos en hospitales, la mortalidad es casi cero. Por esto la mortalidad que registramos es muy poco explicable”.
Obstáculos y resultados. La escasa cantidad de casos y la dificultad para acceder a los registros dificultan la investigación. “Uno de los problemas importantes que tenemos es que el certificado de defunción está protegido por secreto estadístico, de tal manera que estamos accediendo de a poco. Lo que hacemos es identificar a la paciente y conocer su historial clínico para luego entrevistar a la familia, trabajo que realizó Julio Moreira, un alumno avanzado de la carrera y que fue un significativo aporte para el avance del estudio. Lo que pretendemos con esto es comprender todo lo que paso desde el momento en que la mujer se entero de que estaba embarazada y hasta su deceso”.
La investigación empezó en 2009 y finalizará en dos años. Como conclusión preliminar anticiparon que el 75 por ciento de las causas de muerte materna están relacionado con abortos, hemorragias o sepsis (estás últimas vinculadas en la mayoría de los casos al aborto) y la hipertensión arterial derivada del no control durante el embarazo. Además, el 18 por ciento de la carga de morbilidad la mujer sufre está ligada en Argentina a cuestiones relacionadas al embarazo y el parto.
“El aborto suma en los registros de mortalidad, pero menos de lo que a priori se piensa, tanto en las mujeres adultas como en las adolescentes”, dijo Zurita y añadió: “Otra situación que vimos durante la investigación es que la mayor parte de las muertes ocurren en madres que ya tuvieron hijos, cuatro o cinco”.
“Tenemos interés en detectar qué aspecto falla de la atención. Por ejemplo, otra de las situaciones encontradas es que el control del embarazo supone para la mujer una situación muy incómoda al tener que someterse al control del médico, en una posición no muy agradable. Queremos saber hasta qué punto existen barreras culturales que hacen que la madre, sabiendo que tiene que ir al médico no lo hace para evitar estas situaciones”.
Situación socioeconómica. La mayor mortalidad materna se da en mujeres de escasos recursos. “Pero no sucede por la condición de pobreza sino porque tienen muchos más hijos por lo cual la mujer está muchas veces más expuesta al parto”.
La situación de salud de la región central y sur del país es completamente diferente que en el norte, explicaron. “Los sistemas sociales y de salud de las provincias más desarrolladas funcionan mejor que el de las provincias pobres”.
Laura Orgoñ
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