Instan a tomar conciencia sobre los males del Paco

El senador provincial, David Dos Santos, analizó la realidad de la droga que cada día mata más personas. Lo hizo des- de una óptica médica y política y pidió apoyo de todos los sectores involucrados en evitar el consumo de la sustancia.

Nuestra visión de la lucha contra la drogadicción está, de alguna manera, respaldada por nuestra experiencia en el terreno de la salud pública, por el ejercicio de la política y hasta por el propio ejercicio de la profesión médica, lo que nos permite tener una opinión fundada en la realidad.

En esta “batalla”, vemos dos etapas bien diferentes aunque muy conectadas entre sí; una, que correspondería a la visión micro, la de cada caso en particular, que afecta a un integrante de una familia, a la que conmueve y pone en emergencia.

Aquí se puede observar una situación previa al contacto del paciente con la droga que, en general está marcada por una ruptura o afectación grave de la relación padres-hijo que lleva a éste, a buscar cobijo en experiencias que lo contengan, y si el ambiente que frecuenta les ofrece la posibilidad del contacto con estas substancias, es más probable que las acepten. Lo que sigue, es que la familia despierta a la realidad de un hijo adicto con las severas consecuencias para el individuo y su entorno.

La otra etapa, la que correspondería a la visión macro, es cuando lo miramos desde el conjunto de la sociedad, el lugar desde donde la política o los gobernantes debemos mirar.

Aquí vemos familias que ya han perdido integrantes, otras que tienen miembros gravemente enfermos por la adicción y una gran cantidad de jóvenes y grupos familiares en riesgo.

Este flagelo tomó a muestra sociedad con las defensas bajas, y es responsabilidad de todos, gobierno y ciudadanía, elevar estos niveles, y esto no es nada más ni nada menos, que elevar el nivel de conciencia del conjunto, que estamos ante una “guerra”, que nos ha quitado hijos, que nos tiene a muchos más severamente afectados, y que nos amenaza a todos.

La forma como debemos comprender a la prevención, es la toma de conciencia del conjunto de la sociedad de la gravedad de esta amenaza. Mientras la problemática sea tema solo de las instituciones que representen a los afectados por la droga y a las estructuras de gobierno, estaremos en riesgo.

Esto no alcanza. Tenemos la responsabilidad de encontrar los caminos para instalar en todos y cada uno de los hogares de la Provincia y el País, la dimensión de la gravedad de esta endemia. Si no lo logramos, estaremos con el futuro en seriamente comprometido.