La lluvia despertó preocupación en los funcionarios sanitarios por dos cuestiones ligadas directamente a la enfermedad del dengue. La primera tiene que ver con la acumulación de agua que las precipitaciones pudieron provocar en recipientes generando potenciales criaderos del mosquito vector. Por otra parte, las condiciones climáticas (agua, mucho calor y humedad) hacen que el ciclo del insecto se acelere. Así lo explicó la subdirectora de Zoonosis y Control de vectores del Ministerio de Salud Publica, Karina Ramos, quien pidió el máximo de prevención a la comunidad.
Los monitoreos que realiza la cartera sanitaria por estos días son intensos y los resultados muestran aún la falta de conciencia y de compromiso de la gente: “Lo que detectamos fueron muchos recipientes con agua”, dijo la funcionaria luego de recorrer las municipalidades ubicadas sobre la frontera. “No encontramos muchos focos, pero sí acumulaciones de agua que podrían transformarse en potenciales criaderos”, agregó.
Los recipientes de plásticos y los neumáticos son los espacios sobre los que hay que tener más cuidado, recomendó. Sin embargo, pidió a las familias que eliminen cualquier elemento o sitio donde se pueda acumular agua, más aún después de las intensas precipitaciones que sucedieron en la última semana.
“Las lluvias, junto con el calor intenso y la humedad, generan el ambiente propicio para que el ciclo del mosquito se acelere y eso es un riesgo”, advirtió al señalar que, por otra parte, “las acumulaciones del agua que quedó de las lluvias deben ser eliminadas para evitar que el Aedes Aegypti deposite sus huevos allí”.
Por su parte, Juan Pascual, director de Programas de Salud Pública, quitó entidad a la situación y dijo que “mosquitos hay siempre, el problema es cuando aparece la enfermedad”. Sobre la presencia de los insectos, dijo que se trata de algo que ocurre durante todo el año, incluso en invierno: “Esto pasa porque no se hace la tarea de descacharrizado que se debe hacer”.
Mosquitos grandes
En los últimos días, la ciudad se vio invadida por mosquitos con características pocos usuales: grandes y de patas manchadas. Explicó Karina Ramos que muchas personas confundes a éstos con el Aedes Aegypti “porque tienen anillitos en sus patas”. Sin embargo, aclaró, se trata de otra especie conocida comúnmente como “mosquitos de las inundaciones”.
“No es algo que esté pasando sólo en Corrientes, aparecen en muchas partes y se debe a las condiciones climáticas actuales”. Para diferenciarlos de los vectores que transmiten el dengue explicó: “El Aedes es más chico y de un color oscuro. Además, estos insectos grandes pueden circular a cualquier hora del día”.
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