Se trata de una mascota que estuvo con su dueño unos días en la localidad de La Cruz, donde contrajo la enfermedad. Luego de la notificación se implementó un operativo de fumigación y control vectorial por parte del Ministerio de Salud Pública que abarcó toda la manzana de calle Buenos Aires al 900 y lugares aledaños donde reside el perro infectado.Equipos técnicos del Ministerio de Salud Pública realizaron hoy trabajos de fumigación y control vectorial en la zona del centro capitalino, por calle Buenos Aires al 900 donde se constató la presencia de un perro con leishmaniasis visceral que contrajo la enfermedad en una localidad del interior de la provincia. Las tareas continuarán mañana de 8:00 a 12:00 en las viviendas que no se pudo ingresar por ausencia de moradores.
El doctor Gustavo Fernández, subdirector de Vigilancia de Laboratorios y Redes de la Provincia afirmó que el equipo del Ministerio estuvo trabajando en la zona a raíz de la notificación de un médico veterinario privado, quien brindó un informe que constataba el estudio positivo para leishmaniasis canina, en virtud de lo cual se convocó al veterinario y se realizó un relevamiento epidemiológico que también reveló que el animal estuvo unos días en la localidad de La Cruz, donde existe un foco importante de transmisión activa de esta parasitosis.
Comentó que en virtud de esto se convocó a un equipo de Zoonosis, coordinado por la doctora. Lilian Persíncula, quien a su vez notificó al Municipio para hacer un trabajo en conjunto que consistió en el relevamiento y control de vector. En función de lo cual se hizo una doble visita al domicilio afectado, primero para informar sobre la situación, qué hacer con la mascota y luego coordinar las tareas de control vectorial, abarcando gran parte del barrio.
En cuanto a las tareas de control informó que implicó un relevamiento en toda la manzana donde está el caso y las viviendas que se encuentran en las veredas lindantes. “Se realiza la fumigación peridomiciliaria, porque es un insecto que habita en este sector, es un vector muy pequeño que vive en la zona húmeda, bajo las hojas, en los troncos de los árboles, donde se centra la fumigación para controlarlo”, añadió el profesional.
Aclaró que en el centro de la ciudad de Corrientes no hay registro aún de que exista el vector transmisor, no así en las zonas más alejadas como los Barrios Molina Punta, Aeropuerto y otras donde existe abundante vegetación. Insistió que según los relevamientos que se han hecho en años anteriores no se constataron la presencia de dicho vector, no obstante a modo de seguir el protocolo de control y trabajo, se realiza la fumigación y relevamiento vectorial.
Relató que el perro afectado se encuentra en su etapa aguda de la enfermedad, incubandola; empezó con algunos síntomas, lo cual hizo que la dueña consulte con el veterinario, realizándose luego el estudio de screening y luego el estudio de laboratorio. La mascota se encuentra aislada y en observación en la Facultad de Veterinaria, donde se le están realizando otros estudios por pedido de la dueña y en función de cómo se confirme el cuadro se determinará el paso a seguir según la exigencia del protocolo de trabajo.
El bioquímico Fernández recordó que no es el primer caso que ocurre en esta ciudad y desde el 2009 se registraron ocho en total hasta la fecha. Todos con los mismos antecedentes, o sea mascotas que han viajado a otras localidades donde hay transmisión activa.
PREVENCIÓN
Como primera medida indicó evitar llevar mascotas a lugares donde hay transmisión activa como localidades ubicadas en la costa del río Uruguay, la zona de Misiones, Ituzaingó, Paraguay, Brasil, entre otras.
Para aquellas personas que tengan mascotas en dichas zonas hay que tomar medidas preventivas como el encierro de los perros en horarios nocturnos, que duerman en lugares aislados de lo que es la vegetación, “porque el vector transmisor está oculto en las zonas húmedas, en los troncos de árboles, en las ramas y donde hay muchas hojas”, reiteró Fernández.
También se pueden usar repelentes para las mascotas, para ello existen collares, pipetas, aerosoles, además de la fumigación periódica de las viviendas, el uso de telas mosquiteras en las ventanas y puertas, entre otras medidas.
RECOMENDACIONES
El profesional indicó observar y prestar atención a las mascotas, en este caso a los perros, si presentan alguna alteración como por ejemplo el crecimiento desmesurado o anormal de las uñas, si pierde brillo el color de pelo del animal, si se presentan manchas o se les cae el pelo en las orejas, además de presentar signos de descamación en las zonas de los ojos, fiebre, agotamiento, cansancio, pérdida de peso entre otros factores que denoten el cambio de conducta, lo cual requiera la consulta inmediata al médico veterinario para solicitar todo tipo de estudio y uno de ellos es el de leishmaniasis visceral.
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