Un total de 29 viviendas entregó el gobierno provincial a través del INVICO, en el barrio Patono y donde el gobernador el mandatario instó a los vecinos a “forjar la unidad entre todos como factor de crecimiento y de mejora”, a través de una comisión que les “permita avanzar sostenidamente”.
El gobernador Ricardo Colombi presidió en la tarde de este lunes la entrega de 29 unidades habitacionales del Plan Federal “Mejor Vivir”, ubicadas a la vera de la Escuela Nº 291 y que demandaron una inversión, inicialmente a cargo del INVICO, del orden del millón y medio de pesos.
El jefe del gobierno provincial, al hablar en la oportunidad, alentó a la “unidad entre todos los vecinos”, ya que a partir de esa reunión con objetivos comunes, a través de una comisión, les permitiría “avanzar sostenidamente y generar los pedidos desde abajo hacia arriba que es cuando surten efecto”.
Recordó que por el contrario, “cuando se quedan a esperar a que les lleguen las cosas, no siempre resultan bien ya que no se les escucha a los vecinos”. Señaló que “nuestra responsabilidad es mejorar vuestra calidad de vida entregando estas viviendas. Pero luego hay muchas cosas más que deben lograr a través del reclamo organizado”, sostuvo.
El acto
La ceremonia inaugural del grupo de vivienda, se inició a las 18 con la presencia del gobernador y otras altas autoridades y donde el sacerdote César Rivas bendijo las llaves y la documentación a entregar a los flamantes propietarios.
Tras una oración impetratoria a cargo del religioso, la adjudicataria Librada Claudia Romero habló en representación de los vecinos destacando que “tener nuestra casa significa que podemos empezar a construir nuestro futuro y que nuestros hijos crezcan en un lugar mejor y más seguro” en un “barrio que va creciendo y mejorando”.
Reconoció la joven que “nuestra vida cambiará en muchos aspectos y tener una casa propia, es una gran alegría y nos da la esperanza que muchas otras familias puedan alcanzar el sueño que hoy se nos hace realidad a nosotros, porque es un derecho que le corresponde a todo ciudadano”.
Finalizadas las palabras de la adjudicataria, habló brevemente el gobernador Colombi tras lo cual se procedió a entregar las llaves, una carpeta conteniendo el título de propiedad y una caja con una veintena de libros, entre ellos la Constitución Nacional, un diccionario, un libro de primeros auxilios, cuentos para niños y una guía de cómo conseguir trabajo.
Presencias
Acompañaron al mandatario provincia, los ministros de Gobierno y Justicia, Gustavo Valdés y de Hacienda y Finanzas, Enrique Vaz Torres, el interventor y el subinterventor del Instituto de Viviendas de Corrientes –INVICO-, arquitecto Gustavo Maidana y contador Bernardo Rodríguez; los secretarios de Desarrollo Humano, Raúl Martínez y de Deportes, Jorge Lucietti.
También estuvieron presentes los subsecretarios de Acción Social, Diógenes González y de Obras Públicas, Miguel Tombolini; el administrador del Instituto Correntino del Agua, Mario Rujana, personal de la planta profesional del INVICO, otras autoridades, vecinos e invitados.
Características
Edificadas en un predio propiedad del Instituto de Viviendas, se asignó un terreno de 220 metros cuadrados a cada unidad habitacional que consta, en 36 metros cuadrados, de una cocina – comedor, un dormitorio, baño y lavadero, así como también permite el crecimiento de la vivienda.
Además todo el sector está dotado de agua corriente, servicio de cloacas, así como red eléctrica y alumbrado público, instalaciones éstas que demandaron la construcción de una estación subtransformadora.
Respecto a las cloacas, la información proporcionada por la Gerencia de Proyectos Autogestivos, se puso de relieve que dado que los terrenos son relativamente bajos en relación al desagüe central, se construyó un estación de bombeo de los líquidos para impulsarlos hasta la colectora principal. La obra favorece a un total de 600 viviendas ubicadas en la zona.
La construcción se realizó a través de la Gerencia mencionada, a cargo del arquitecto Ricardo Capoccetti y por el sistema de “obra por administración”, lo que permitió concursar a numerosas pequeñas empresas constructoras e intervenir a un total de siete que generaron abundante mano de obra durante la realización de los trabajos.
Los fondos, si bien están originados en un programa nacional, debieron ser aportados por el INVICO para poder iniciar, continuar y concluir la obra, en espera de los giros de las partidas correspondientes.
Cabe consignar finalmente que en terrenos linderos se preparó un espacio como cancha de fútbol al que se dotó de arcos para la práctica activa de ese deporte y otros similares, entre los habitantes del barrio.
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