domingo, 22 de agosto de 2010

PADRES

Teresita S. de Frechou
Psicopedagoga
Culturalizar conductas, comportamientos
Determinare, para su mejor comprensión, términos sencillos para que la comunidad de padres de adolescentes, interpreten la intención manifiesta en este texto. 

Culturalizar, exige un camino por desandar, como por ejemplo, por qué se experimenta ciertos comportamientos sociales en los adolescentes con respecto al consumo desmedido de alcohol.

La mayor parte de los medios, abordan este tema, y en muchos solo se recrean respuestas extraídas de autores que le dieron un protagonismo a las crisis “naturales” de esta etapa.

Cargamos las tintas al momento, que se vive, a las saturadas agendas asfixiantes de mamá y papá, al espíritu consumista, a la economía, etc., etc., etc. Esto me recuerda al juego “El gran bonete” ¿quién tiene? – ¿yo?....no señor, ¿ y Ud. Sr., y así sucesivamente. Los que estamos ocupados en encontrar soluciones, las mismas se hacen esperar, tengo la sensación de entrar en una charada.

Que no nos asuste pero vivimos en una sociedad un poco dañina para los adolescentes, en realidad para todos El proceso civilizador, está en una etapa de arrogancia entremezclado, con violencia y desconsideración al “otro”.

Las priorizaciones de los adolescentes no son bien vista por los adultos, y nos olvidamos algunos padres, que fueron inductores ingenuos de actitudes reñidas con la buena convivencia.

Esto me lleva a abordar dos interesantes conductas en el campo emocional: aprender a autocontrolarse, y gobernarse .y esto se consigue poniendo límites, que se me entienda :sin autoritarismo..Debemos aprender a decir no y junto a nuestros hijos. Lógicamente tendríamos que ensayar una previa evaluación madura para decir sí o no, y retomar el “diálogo democrático como modelo de interacción”.

Los padres deben afianzarse en el rol de formadores de individuos de BIEN.

Para muchos padres eligen la comodidad de eludir al hijo adolescente incontrolable, y rebelde, porque no soporta las consecuencias, por lo tanto derivan el problema-no lo entiendo, no dispongo de tiempo- El adolescente lo percibe y experimenta confusión,, un desorden emocional conduciéndolo a recurrir a malos modelos mediáticos.

Los padres deben acompañar este proceso que vive el adolescente, ensayar con él o ella, reflexionar con ellos porque es entrar a las dudas, a la apertura y a la comunicación, y es un escenario fantástico de encuentros.

NO NOS ACOSTUMBREMOS A LA IMPACIENCIA, Y A LA NEGACIÓN ECUANIMIDAD Y ARMONÍA ENTRE PADRES Y JÓVENES.

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